Desafiando a la enfermedad: Las ranas panameñas contraatacan

Muchas enfermedades infecciosas pueden desaparecer después de un brote. Peste bubónica, cólera y la influenza son ejemplos que han ocurrido durante la historia humana. Los mismos fenómenos ocurren con las enfermedades de las especies salvajes. ¿Cómo ocurre esto? Una explicación es que el patógeno evoluciona y se convierte en menos mortal para el organismo, por lo que no consigue matar al organismo, y por lo tanto asegurar su propia supervivencia. Mientras que esta situación puede ocurrir, sabemos que hay más razones por las cuales la gravedad de una enfermedad cambia.

Cori Richards y Jamie Voyles

 Para los anfibios, sabemos de una enfermedad letal llamada “chitridiomycosis” descubierta en los años 90. Esta enfermedad fue devastadora para Centroamérica, donde puede que haya extinguido especies enteras. Durante este estudio, hicimos el excitante descubrimiento de que algunas especies de anfibios que parecían extinguidas están aguantando y además mejorando. Queríamos entender como ocurría esto. ¿Era un cambio en el patógeno, en la rana o en ambos?

Para responder a estas preguntas, hicimos dos cosas. Para empezar cogimos ranas en Panamá antes del brote y después del brote de la enfermedad. Además, recogimos muestras del patógeno en múltiples sitios: donde el brote inicial (10 años después). Encontramos que casi una década después del brote, el patógeno era igual de mortal. Sin embargo, las ranas sobreviven y tienen mejores defensas contra él. ¡Las ranas panameñas están contraatacando!

Atelopus varius

Entender como las comunidades de anfibios se están recuperando después de los brotes de la enfermedad es importante por diferentes razones. Primero, resolver como funciona esto nos ayudará a desarrollar mejores estrategias de conservación para proteger a los anfibios de las enfermedades que les llevan a la extinción. Segundo, aclarar como el brote de la enfermedad disminuye nos ayudará a predecir, y responder, a otros posibles patógenos que puedan portar las plantas, animales o humanos. Estas metas son muy importantes en una época en la cual la globalización incrementa la introducción de patógenos a poblaciones de especies inocentes.

Shifts in disease dynamics in a tropical amphibian assemblage are not due to pathogen attenuation JAMIE VOYLES, DOUGLAS C. WOODHAMS, VERONICA SAENZ, ALLISON Q. BYRNE, RACHEL PEREZ, GABRIELA RIOS-SOTELO, MASON J. RYAN, MOLLY C. BLETZ, FLORENCE ANN SOBELL, SHAWNA MCLETCHIE, LAURA REINERT, ERICA BREE ROSENBLUM, LOUISE A. ROLLINS-SMITH, ROBERTO IBÁÑEZ, JULIE M. RAY, EDGARDO J. GRIFFITH, HEIDI ROSS, CORINNE L. RICHARDS-ZAWACKI SCIENCE 30 MAR 2018 : 1517-1519

por Jamie Voyles and Cori Richards-Zawacki
Traducción: Álvaro Gil

STRI y MiAmbiente participan en ensayos de liberación de ranas en el este de Panamá como parte de la implementación del Plan de Acción para la Conservación de los Anfibios en Panamá

Científicos del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI) y funcionarios del Ministerio de Ambiente de Panamá (MiAmbiente) visitaron la Reserva del Valle del Mamoní, donde se están realizando ensayos de liberación con ranas arlequín limosa (Atelopus limosus). Estas ranas fueron criadas en cautiverio y son los descendientes de ranas colectadas hace unos años en dicha zona. Por parte de MiAmbiente asistieron los biólogos Erick Núñez y Anthony Vega, técnicos del Departamento de Biodiversidad de la Dirección de Áreas Protegidas y Vida Silvestre. Les acompañaron el Dr. Roberto Ibáñez, investigador panameño y director del Proyecto de Rescate y Conservación de Anfibios de Panamá (PARC por sus siglas en inglés), y el Dr. Juan Maté, gerente para asuntos y operaciones científicas del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, enlace institucional con MiAmbiente, el estudiante de doctorado del Smithsonian-Mason School of Conservation de George Mason University, Blake Klocke, quien actualmente realiza esta investigación, fue el anfitrión y guía y de esta visita, conjuntamente con su asistente de campo Mirjana Mataya.

Algunas de las ranas utilizadas en la investigación provienen del ensayo de liberación inicial realizado en la Reserva de El Valle del Mamoní por los estudiantes panameños de doctorado de Virginia Tech, Daniel Medina y Angie Estrada. Ellos mantuvieron las ranas dentro de encierros en esta reserva, con el propósito de protegerlas de algunos depredadores y, así poder, obtener muestras y determinar si eran infectadas por el hongo quítrido (Batrachochytrium dendrobatidis). En un segundo ensayo de liberación, el estudiante Blake Klocke, liberó éstas y otras ranas adicionales. En esta fase de la investigación, uno de los objetivos es determinar si es relevante mantenerlas inicialmente en encierros antes de soltarlas. En adición, algunas de las ranas fueron equipadas con radio-transmisores que permiten seguir sus movimientos y estimar el tamaño de sus territorios.

La visita con los funcionarios de MiAmbiente tenía como objetivo dar seguimiento en campo a los ensayos de liberación y ver los avances de la investigación, incluyendo el seguimiento que se le está dando a las ranas liberadas. Blake Klocke les mostró el funcionamiento del sistema de rastreo por radio-telemetría utilizando mini-transistores. Se pudo constatar la efectividad de cómo esta herramienta tecnológica, aplicada a la investigación científica, nos permite seguir los movimientos de estas pequeñas ranas. Las ranas sin radio-transmisores eran sin duda más difíciles de observar. Igualmente, se mostró como se obtienen las mediciones del tamaño y peso de las ranas y se colectan muestras de su piel con hisopos para la detección del hongo quítrido. Hasta el momento de la visita las ranas a las que se les está dando seguimiento se han mantenido cerca del punto de liberación. Sin embargo, con los datos que se están recabando, se espera estimar la futura dispersión y supervivencia de las mismas.

La iniciativa de adelantar los ensayos de liberación forma parte del Proyecto de Rescate y Conservación de Anfibios de Panamá, conocido coloquialmente como PARC y que administra el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI) y bajo la supervisión de MiAmbiente. Este proyecto está conformado por varias organizaciones, que incluyen a Cheyenne Mountain Zoo, Houston Zoo, Smithsonian’s National Zoological Park y Zoo New England; además, es y ha sido apoyado por una larga lista de patrocinadores, entre ellos Minera Panamá SA. PARC cuenta con dos instalaciones, una en el Zoológico El Níspero en El Valle de Antón, Coclé, actualmente conocidas como PARC El Valle y la otra en el poblado de Gamboa, en la Cuenca del Canal de Panamá, conocida como PARC Gamboa. La instalación PARC El Valle recibió las primeras ranas rescatadas, que temporalmente se habían mantenido en el Hotel Campestre, en el 2007 por iniciativa del Zoológico El Níspero y Houston Zoo, con financiamiento de este último, como una respuesta de emergencia a la reducción en el número de anfibios por la mortalidad causada cuando el hongo quítrido llegó a El Valle de Antón en el 2006. En 2009, esta instalación en El Valle se incorpora al proyecto marco del PARC, donde ha continuado su operación dentro del Zoológico El Níspero.

Además, en el 2009, PARC Gamboa surge inicialmente con instalaciones en el Parque Municipal Summit, antes de reubicarse a su ubicación actual en Gamboa en el 2012, con la finalidad de mejorar y expandir la capacidad existente para la conservación ex-situ de anfibios y crear una salvaguarda adicional en un segundo sitio. El proyecto PARC se caracteriza por ser el resultado del esfuerzo mancomunado de múltiples organizaciones y gran número de personas que, a través de los años, han contribuido a la conservación de los anfibios de Panamá.

El Ministerio de Ambiente y el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales (STRI) mantienen un acuerdo de colaboración interinstitucional con el cual trabajan estrechamente en la implementación del Plan de Acción para la Conservación de los Anfibios en Panamá aprobado en el 2011. El Plan tiene como objetivo el asegurar la conservación de las poblaciones de anfibios, a través de la implementación de acciones que promuevan la investigación y el manejo, tanto in-situ (en su hábitat) como ex-situ (fuera de su hábitat); además de, fomentar la educación de la sociedad en general. Este plan integra actividades específicas de investigación, conservación y educación, a corto y mediano plazo, con la determinación de salvaguardar nuestro patrimonio natural.

Esta visita ha permitido realizar una verificación conjunta entre STRI y MiAmbiente sobre los avances del proyecto. Se ha alcanzado un hito importante en la implementación de este Plan de Acción, ya que ésta es la primera vez en Panamá, que un proyecto de conservación de anfibios está ejecutando la fase donde se está investigando el comportamiento y la supervivencia de ranas criadas en cautiverio al exponerlas a su ambiente natural. Los resultados de estos ensayos de liberación serán de gran utilidad para guiar los esfuerzos futuros tendientes a reestablecer las poblaciones de ciertas especies de ranas en sitios donde éstas han disminuido en abundancia o desaparecido.

El Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, en ciudad de Panamá, Panamá, es una unidad de la Institución Smithsonian. El Instituto promueve la comprensión de la naturaleza tropical y su importancia para el bienestar de la humanidad; capacita estudiantes para llevar a cabo investigaciones en los trópicos; y fomenta la conservación mediante la concienciación pública sobre la belleza e importancia de los ecosistemas tropicales. Sitio web: www.stri.si.edu. Video Promocional:

La recientemente descubierta salamandra devora hongos y preocupaciones por el futuro de la biodiversidad de salamandras en los Estados Unidos

Las caídas poblacionales en Holanda de la salamandra común (Salamandra salamandra) se han atribuido al recientemente descrito hongo patógeno Batrachochytrium salamandrivorans (Bs). Desde 2010 la población de S. salamandra en Bunderbos, Holanda ha disminuido en un 96%. El artículo científico de An Martel et al. mostró que algunas especies de salamandras de los Estados Unidos son muy susceptibles a Bs, que las salamandras mascotas también son susceptibles, y notó que aun no ha sido detectado en los Estados Unidos. Grandes números de salamandras vivas son importadas legalmente a los Estados Unidos cada año para comercio de mascotas. En los primeros seis meses de 2014, por ejemplo, 3445 salamandras comunes fueron importadas hacia los Estados Unidos en su mayoría desde Eslovenia.

appalachian salamanders

El género Batrachochytrium, que solo incluia a Batrachochytrium dendrobatidis (Bd) antes de descubrir Bs, ha ganado una mala reputación por afectar poblaciones de anfibios globalmente. Biólogos creen que estamos observando la sexta extinción en masa, en parte por la virulencia y expansión global de Bd en anfibios. El descubrimiento de este nuevo patógeno y la mejor comprensión de los devastadores efectos que tienen las enfermedades de vida silvestre causan preocupación por el futuro de las salamandras de los Estados Unidos.

Los Estados Unidos son un hotspot de biodiversidad para salamandras

Los Apalaches son un reconocido hotspot para salamandras. La posible amenaza de este patógeno emergente en los Estados Unidos es aun mas grande, y es de gran importancia que se mantenga este patógeno fuera de los Estados Unidos. La diversidad genética de salamandras en los Apalaches es el más alto del mundo con 72 especies de salamandras que son en su mayoría endémicas. Los Estados Unidos es el hogar de nueve de las diez familias de salamandras y cuatro de las diez familias de salamandras existentes son endémicas de los Estados Unidos, incluyendo amphiumas, salamandras gigantes del Pacífico, salamandras olímpicas y sirenas. Salamandras topo también se encuentran en Canadá y México, pero casi toda su biodiversidad está contenida dentro de las fronteras de los E.E.U.U.. Las salamandras gigantes son un linaje primitivo de salamandras gigantes con tres especies existentes, ubicados en los EE.UU., Japón y China. El salamandra americana gigante es uno de los gigantes y ha encontrado refugio en las montañas Apalaches desde que se originaron los anfibios, hace unos 360 millones de años.

Salamander biodiversity hotspotEl papel ecológico de las salamandras, la pequeña mayoría, a menudo puede pasar desapercibido, pero tiene en cuenta esta evaluación de la biomasa de salamandras en los Apalaches. Un estudio clásico de marcado y recaptura en el este de los EE.UU. señaló: «La biomasa de las salamandras es aproximadamente el doble que el de las aves durante la temporada alta de reproducción de las aves y es aproximadamente igual a la biomasa de pequeños mamíferos» (Burton y Likens 1975). Con estas densidades altas, un nuevo agente patógeno-salamandra específico al que estos animales nunca han sido expuestos tienen el potencial de ser capaz de extenderse como un reguero de pólvora, al igual que Bd se propaga a través de las poblaciones de anfibios neotropicales ingenuos.

Se necesita una acción inmediata

Debemos detener de inmediato la importación de salamandras de cualquier fuente en el extranjero, a menos que puedan ser certificados libres de Bs y Bd. En mayo de 2008 la OIE, que es la organización creada para mitigar las enfermedades zoonóticas (es decir, el ántrax, la enfermedad de las vacas locas, etc.), reconoció Bd como una enfermedad de declaración obligatoria. Regulaciones comerciales más estrictas recomendadas por la OIE reducirían sustancialmente la propagación de ambos B y Bd, sin embargo, los cambios de la OIE no han sido aprobados por el Departamento de Agricultura y del Interior de los Estados Unidos y hasta lograrlo no hay medios legales para rechazar los envíos infectados.

por Blake Klocke

Traducido por Lourdes Hernandez y Dara Wilson

Experimentos nuevos ofrecen esperanza para las ranas que se enfrentan el quítrido

Probiotics bath

A Las ranas doradas se les dieron un baño en una de cuatro soluciones de probióticos. (Foto por Brian Gratwicke, Smithsonian Conservation Biology Institute)

Solemos pensar de las bacterias como si fueron malo para nosotros, pero eso no es siempre el caso. Para nosotros, los seres humanos, los ejemplos más comunes de bacterias benéficas o probióticos, viven en el yogur. Ahora, los científicos creen que los probióticos de anfibios puede ser la clave para la lucha contra la quitridiomicosis, una enfermedad fúngica de las ranas que devasta las ranas en todo el mundo.

Hace unos años, Reid Harris, un profesor de biología en la Universidad James Madison, descubrió que las salamandras locales que podrían sobrevivir quitridios acogido a las bacterias en su piel. Ahora, Brian Gratwicke, un biólogo de la investigación en el Smithsonian Conservation Biology Institute, está colaborando con un equipo de las universidades deVirginia Tech, James Madison, Villanova y Vanderbilt en un experimento para ver si bacterias similares pueden proteger a la rana dorada de Panamá, que él llama “el arquetipo” o ejemplo modelo para la conservación de los anfibios.

«El primer paso es encontrar un probiótico que se pegará a las ranas doradas. A principios de diciembre, el equipo comenzó a dar baños a ranas doradas por medio de cuatro tipos diferentes de bacterias. Los investigadores recogieron los probióticos potenciales de las ranas en el Panamá en 2009. Los finalistas fueron elegidos en base por la capacidad para prevenir el crecimiento del quítrido en pruebas en el laboratorio, con una preferencia por las bacterias que son comunes en los parientes cercanos de las ranas doradas de Panamá.

Cada dos semanas, se toman muestras de cada rana para comprobar si el probiótico se ha pegado al piel. Las pruebas van a tomar algún tiempo, entonces después de solo un mes y medio el equipo está todavía esperando los resultados para ver que si los probióticos se están pegando bien. Pero ellos ya tienen una buena noticia.

«Las bacterias no han causado ningún problema con las ranas y todas se ven saludables», dijo Gratwicke, que hace hincapié en lo importante que es para utilizar sólo las bacterias beneficiosas. Además del seguimiento de la ganancia de peso y otras características visibles, Shawna Cikanek, un estudiante de Medicina Veterinaria en Kansas State College está utilizando excremento de rana para estudiar las hormonas de estrés para obtener una mejor imagen de la salud de los animales en general y para ver si las bacterias están causando ningún tipo de estrés .

Los probióticos que se pegan a las ranas para un total de tres meses pasarán a la siguiente ronda de pruebas, cuando las ranas blindados con las bacterias se infectaran con el quítrido para comprobar si hay efectos adversos.

«Esperamos que las bacterias se van a hacer su cosa y protegerán a estos pequeñitos», dijo Matt Becker, un candidato de doctorado de la universidad Virginia Tech, que está llevando a cabo el experimento. Los probióticos que tienen éxito se pondrán a prueba otra vez en las ranas doradas criadas en Panamá antes que los científicos a desarrollan un plan final.

Hasta el momento, el quítrido ha desafiado los intentos para detenerlo. Los científicos pueden ser capaces de criar selectivamente ranas resistentes a la quitridiomicosis, pero hasta ahora ha habido muy poco trabajo hecho en esa dirección. Sin embargo, hay grandes esperanzas en el potencial del uso de probióticos para proteger las ranas. «Es una apuesta arriesgada, pero es nuestra mejor oportunidad», dijo Gratwicke.

Becker espera que un día, los probióticos se permiten a las ranas doradas de Panamá regresar a su ambiente natural. «Estos ranitas son realmente únicos y es tan triste no verlos en su hábitat natural», dijo Becker. «Tenemos una obligación moral ya que los indicadores están apuntando a los seres humanos como difusores principales de la enfermedad a través del comercio de ranas.»

Meghan Bartels, Zoologico Nacional Smithsonian (Traducción por Tracy Stetzinger)

Los científicos del Smithsonian toman una encuesta de las ranas en los Andes peruanos

la rana del agua Acancocha (Telmatobiusjelskii).

Este diciembre, dos científico investigadores pasaron dos semanas haciendo eso para completar una encuesta de la rana del agua Acancocha (Telmatobiusjelskii). (Jessica Deichmann, Smithsonian Conservation Biology Institute)

Imagínese mediendo la cola largo de un inquieto renacuajo.  Ahora imagínese haciendolo cuando el aire es suficientemente delgada como para hacerse sientir  mareado, está a punto de comenzar una tormenta de granizo y acabas de pasar los ultimos 45 minutos en una corriente helada hasta los codos.

Este diciembre, Jessica Deichmann, un científico investigador en el Instituto de la Biología de Conservación para el Smithsonian y Ed Smith, un biólogo del Zoologico Nacional del Smithsonian que trabaja en el exposición Amazonia, pasaron dos semanas haciendo eso para completar una encuesta de la rana del agua Acancocha(Telmatobiusjelskii). Ellos estaban participando en un estudio para apear la rana para el Programa de Evaluación de la Biodiversidad del Perú (BMAP) de SCBI CentrodeConservaciónpara  laeducaciónysostenibilidad. Esta programa presta la  experiencia científico  del Smithsonian a las empresas de gas y petróleo para reducir los impactos de sus proyectos de desarrollo sobre las plantas y animales locales. Esta fue la tercera encuesta a lo largo de la trayectoria de un gasoducto de gas natural construido en 2009, que se extiende desde el Amazonas atraves de los Andes hasta el Océano Pacífico, a unos 250 kilómetros.

La rana acuática Acancocha se encuentra sólo en las corrientes frías y claras de la elevación alta los Andes peruanos. La rana es uno de los cerca de 40 especies que investigadores están evaluando en torno a la construcción de este gasoducto en particular. Los científicos eligieron esta especie porque históricamente ha sido muy abundante, pero vive en un área relativamente pequeña, con requerimientos precisos. Cuando los individuos de una especie se agrupan, es más fácil perder toda la especie.

«Uno siempre se preocupa por las ranas con pequeñas rangos  geográficas -y no sólo las ranas, pero cualquiera especie de animal», dijo Deichmann.

Cuando usted piensa en los Andes peruanos, es probable que pensas en Machu Picchu, una montaña lujo y verde donde, como Smith, bromea, «si te sientas en un lado por demasiado tiempo se te crecen orquídeas.» Sin embargo, Smith y Deichmann, estaban en un ecosistema muy diferente llamado La Puna que a veces esta apodado, la tundra ecuatorial. La Puna se encuentra en los Andes, donde los árboles no crecen, la lluvia es escasa, y las noches se congelan. El equipo se pasó gran parte de su tiempo a cerca de 15.000 pies sobre el nivel del mar, donde el aire es tan delgado que la respiración es difícil hasta que se acostumbre a ella. «Para nosotros, de las tierras bajas, eso solo era una empresa agotadora», dijo Smith.

El equipo de Deichmann, Smith y dos biólogos peruanos tomaron muestras en doce sitios donde el oleoducto cruza los arroyos de la montaña. En cada sitio, pasaron unos 45 minutos contra el corriente, a los codo de profundidad, buscando ranas y renacuajos. Para cada uno de los renacuajos, primero tomaron una muestra de la boca para la prueba de quítrido. El equipo también registró la longitud del cuerpo del renacuajo, la longitud de la cola, la masa y la etapa de desarrollo. Tambien fotografió cada muestra antes de que el animal fue devuelto a la quebrada.. También tomaron mediciones de la misma quebrada.. A continuación, el equipo repitió todo el proceso con la corriente,despues del oleoducto. En cada sitio sitio se podría tomar cinco o seis horas para hacerlo todo.

Pero Deichmann es claro que valió la pena el proceso. «Sólo para encontrar ranas y renacuajos fue emocionante», dijo. «Sobre todo los adultos-después de horas y horas en el agua helada con los brazos de color púrpura, cuando usted encuentra su primera rana es muy emocionante.»

El equipo todavía no ha procesado los datos, pero sus mediciones iniciales sugieren algunas buenas noticias: por ahora, se han observado efectos evidentes como resultado de la oleoducto. Sin embargo, aunque el equipo encontró cientos de renacuajos, sólo encontraron 10 ranas adultas en todas las áreas de encuesta.

Desafortunadamente, eso sugiere que el quítrido está jugando un papel en la conformación de la estructura de la población. El hongo de la piel sigue proteínas de queratina, el equivalente de los anfibios que se encuentran en los callos de piel, cabello y uñas de los humanos. Los renacuajos suelen sobrevivir quitridiomicosis porque sólo alrededor de sus bocas tienen queratina. En su desarollo la «armadura» de queratina  deja  las ranas vulnerables a la enfermedad que ha diezmado las ranas en menos de medio siglo.

«A partir de la metamorfosis, algo que se llama el ‘reloj quítrido’ se pone en marcha», dijo Smith. En los adultos, «el quítrido interfiere con el balance de agua, por lo general de una manera letal.» Debido a esto, las poblaciones con golpeó-quítrido consisten en muchos renacuajos y algunos adultos.

Y de acuerdo con las encuestas anteriores, «en casi todos los sitios donde ranas y renacuajos estaban presentes, quítrido tambien estaba presente «, dijo Deichmann.

Pero hasta que tengan los resultados de las pruebas de laboratorio de las muestras de la boca de los renacuajos que tomaron el equipo, no van a tener el panorama completo de cómo la enfermedad afecta a estas poblaciones. Y quítrido no es el único peligro que enfrentan estas ranas. «En muchos de nuestros arroyos, era lógico, pero lamentablemente, que encontramos trucha», un depredador invasor, dijo Smith.

Deichmann y Smith estan  de acuerdo en que los datos recopilados serán de utilidad para los esfuerzos de conservación. «Sequiendo las poblaciones ahora nos da una línea de base sin la cual nunca podemos saber lo qué ha cambiado», dijo Smith. El equipo cuenta con una encuesta de seguimiento tentativa para la estación seca de 2012, durante el verano del hemisferio norte. Deichmann espera que los datos de esta viaje de diciembre permitirá que el programa modifica el protocolo de la encuesta para asegurarse de que los futuros viajes se están reuniendo los datos más útiles posibles.

¿Y de esta expedición? «Fue un viaje increíble», dijo Deichmann. «Los hábitats son impresionantes, el paisaje es impresionante. Estás en la cima del mundo «.

Meghan Bartels, Smithsonian’s National Zoo (Traducción por Tracy Stetzinger)

El Comercio de las ranas

Chytrid infected frog

Defenders of Wildlife ha presentado una propuesta del Fish and Wildlife Service (Autoridad National del Agua y el Ambiente) de los EE.UU. para prohibir la importación de las ranas vivas a menos que estén acompañados de un certificado de salud que permita comprobar que están libres del hongo quitridio. (Foto por Brian Gratwicke, Smithsonian Tropical Research Institute)

El comercio mundial de los anfibios ha sido acusado como culpable de la propagación del hongo mortal quítrido. Un estudio publicado en larevista NewScientist pide una cuarentena de anfibios para ayudar a frenar la propagación de la enfermedad.

El estudio secuenciado los genomas de 20 muestras de Bd, recogidos en Europa, África, Norte y Sur América y Australia. Entre ellos encontraron que 16 de las 20 muestras eran genéticamente idénticos.

Los investigadores dicen que la explicación de esto es simple, que en todo el mundo el comercio de anfibios ha permitido la propagación de esta enfermedad.

Los investigadores sugieren que los países imponen una cuarentena a todos los anfibios importados y sólo les permiten quedarse si no están infectados.

Defenders of Wildlife, un socio nuestro en el Proyecto de Rescate y Conservación  de Anfibios de Panamá o PARC, ha presentado una propuesta del Fish and Wildlife Service (Autoridad National del Agua y el Ambiente) de los EE.UU. para prohibir la importación de las ranas vivas a menos que estén acompañados de un certificado de salud que permita comprobar que están libres del hongo quitridio.

«Miles de millones de ranas son objeto de comercio internacional cada año para el consumo humano, y que la industria es responsable por el agotamiento de las poblaciones silvestres, la propagación de enfermedades mortales, y permite que las especies invasoras destruyen la salud de los ecosistemas nativos», dijo Alejandra Goyenechea, abogado de programas internacionales de conservación por Defenders of Wildlife.

El grupo Defenders está trabajando con el próximo Comité de Fauna de CITES para asegurar que el comercio internacional de las ranas no es perjudicial para su supervivencia y con otros grupos entre la CITES para crear conciencia sobre el comercio internacional de las ancas de rana con nuestroinforme.

El Zoológico Nacional tiene éxito recogiendo muestras de semen para salvar una rana en peligro de extinción

Gina Della Togna, una estudiante de doctorado de SCBI y nativa de Panamá, es una de los investigadores a cargo del procedimiento para recoger la esperma.

Gina Della Togna, una estudiante de doctorado de SCBI y nativa de Panamá, es una de los investigadores a cargo del procedimiento para recoger la esperma.

Con casi un tercio de todas las especies de anfibios en peligro de extinción como resultado del hongo mortal quítrido, el Zoológico National del Smithsonio ha dado un paso trascendental hacia la preservación de los genes de los anfibios y la increíble diversidad biológica de los anfibios en todo el mundo. Los investigadores del Smithsonian Conservation Biology Institute (SCBI) en Washington, DC, han comenzado a recolectar muestras de esperma de la colección de ranas doradas Panamanos(Atelopus zeteki) del Zoológico ,que estan en extinción en la naturaleza.

Aunque los investigadores han recogido muestras de semen de otras especies de anfibios, como las ranas gopher del estado de Mississippi y las ranas leopardo, no hay publicaciones que detallan los métodos de recoger la esperma de las ranas doradas panameñas. Colegas de SCBI en el Zoológico de Maryland han ayudado en el proceso, sugieron a los investigadores SCBI el método para recoger los espermatozoides de las ranas utilizando los estímulos hormonales.

«Ahora mismo tenemos tres distintos especies de Atelopus en las colonias de garantía en cautiverio en Panamá», dijo Brian Gratwicke, un biólogo de conservación de SCBI que dirige el programa del zoológico de conservación de los anfibios para frenar la declinación global de anfibios. «Si somos capaces de congelar parte de su esperma,  las ranas doradas serán un modelo para asegurar la integridad genética de especies de ranas en situaciones parecidos.»

Gina Della Togna, una estudiante de doctorado de SCBI y nativa de Panamá, es una de los investigadores a cargo del procedimiento para recoger la esperma. A pesar de todo esto sigue siendo una tarea bastante nuevo, Della Togna dijo que se sentía que era fácil en comparación a la recogida de esperma de los mamíferos. Después de la estimulación hormonal, los espermatozoides se excretan en la orina por la cloaca de la rana, La cloaca es una apertura de usos múltiples de la cual se expulsan las heces, la orina y gases. Esto se contraste con los mamíferos, que poseen estructuras especializadas para la expulsión de los residuos y para la reproducción.

Esperma del rana dorada.

Esperma del rana dorada.

Aunque la recogida de esperma de esta especie ha tenido éxito, encontrar el protocolo de estimulación más eficiente y repetable es crítico. Entonces, la identificación del método adecuado crioprotector y la congelación será otro desafío. Los investigadores sospechan que el componente celular más probable es responsable del movimiento de los espermatozoides, llamada vesícula mitocondrial, tiene una estructura única en comparación con el de otros animales.

«La vesícula mitocondrial es una estructura muy frágil», dijo Della Togna. «La protección de esta estructura será definitivamente uno de nuestros mayores desafios.»

A pesar de los numerosos desafíos, el equipo de investigación que supervisa la recolección de semen y el almacenaje de las muestras se mantienen optimista.

Comizzoli Pierre, un biólogo de SCBI que estudia  gametos, supervisa el proyecto de tesis doctoral esta entusiasmado con la perspectiva de esta empresa y se encarga de estudiar la compleja estructura de los espermatozoides de oro rana con Della Togna.

«Siempre es emocionante descubrir nuevos mecanismos biológicos», dijo Comizzoli. «Los espermatozoides de cada especie tienen características únicas que necesitan ser bien entendida antes de la elaboración de protocolos de conservación», dijo Comizzoli.

Aparte de su importancia genética y natural, la rana dorada de Panamá es un símbolo significativo de la cultura para los panameños. Pueblos precolombinos usaron los imagenes de estas ranas en «huacas», o los objetos sagrados, junto con la creación de leyendas acerca de estas ranas renombrados, que perduran en el campo de Panamá hoy, dijo Della Togna.

«Esta especie no existe cualquier otro lugar del mundo «, dijo Della Togna. «Se encontrara cuadros y esculturas en los mercados locales, en las ventas de artesanías indígenas, en billetes de lotería, y otros lugares. Esperemos que este proyecto ayudará a asegurar que un día usted será capaz de verlo una vez más en las orillas de los ríos panameños donde pertenecen.

Phil Jaseph, El  Zoologico National del Smithsonion (Traducción por Tracy Stetzinger)

Doble Golpe: Serpiente portadora de hongo mortal

blunt-headed tree snake

Un nuevo estudio confirma que el hongo, causante de la mortal enfermedad, chytridiomycosis, está presente en portadores no anfibios en ambientes naturales.. (Photo courtesy of STRI)

La serpiente arbórea de cabeza chata (Imantodes cenchoa) no solo se alimenta de ranas y sus huevos, sino también es portadora del hongo asesino que ha eliminado a más de 100 especies de anfibios alrededor del mundo.

Un nuevo estudio presentado por Vanessa Kilburn y David Green de la Universidad de McGill en Canadá con Roberto Ibáñez del Smithsonian en Panamá y Director Nacional del Proyecto de Rescate y Conservación de Anfibios de Panamá, confirma que el hongo, causante de la mortal enfermedad, Chytridiomycosis, está presente en portadores no anfibios en ambientes naturales.

El equipo monitoreó 13 especies de lagartijas y 8 especies de serpientes de sitios a lo largo de Panamá utilizando pruebas genéticas para identificar ADN micótico de muestras tomadas de la piel de los reptiles con un hisopo de algodón.

Ellos encontraron evidencia de la enfermedad en hasta un 32 por ciento de las lagartijas (Anolis humilis) y en 3 especies diferentes de serpientes.

Lo irónico de que una serpiente que se alimenta de ranas sea portadora de una enfermedad mortal para estos anfibios es que ésta puede eliminar su propia provisión de alimento y causar su desaparición.

–Beth King, Smithsonian en Panamá